miércoles, 21 de octubre de 2015

Cosas, caos y mujeres.

Tengo tantas cosas dentro que, al intentar soltarlas, se atropellan unas a otras. No soy capaz de poner orden en tanto caos, quizás y solo quizás, necesite de un desastre mayor. A ser posible que tenga nombre de mujer, por aquello de que en mi, desordenan pero ordenan a la vez. Y bueno, ya puestos a pedir por qué no ella, sí, ella. No sirve de nada engañarse, a veces duele más hacerlo que decirse la verdad. Por qué debería ocultar que te necesito, por qué tendría que autoengañarme diciéndome que ya no te quiero...
En fin, no sé cómo lo hago pero siempre y sin excepción, acabo hablando de ti, y de cuanto te necesito. Y sí, es un coñazo para mi también escribirte tanto, cuando en realidad lo que quiero es otro verbo que causa escalofríos y se escribe besar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario